Realmente nadie está preparado para enfrentarse al tema de la muerte, pero la vida inexorablemente nos hace enfrentarnos a esta realidad. Sin embargo, un funeral puede proporcionar a la familia y allegados de la persona fallecida la oportunidad de expresar su amor, dolor y aprecio, y afrontar de una manera digna la crisis que se produce con esa pérdida .Puede ser un momento incómodo el tener que acudir a un funeral, o dar un pésame, pero debemos saber qué decir y hacer. Saber comportarse en esta situación es una señal de respeto hacia las personas que están pasando por un momento difícil, al igual que una señal de afecto hacia el fallecido.
Al velatorio, lo más correcto sería que acudiesen sólo las personas allegadas a la persona y sus familiares, pues es un momento muy íntimo. No es lo idóneo acudir para “dejarse ver”. Sin embargo, al funeral ya pueden acudir todos aquellos que lo sientan de corazón, o deseen apoyar a la familia, aunque el finado no haya sido muy cercano.
Cuando te enteras de que alguien acaba de morir, es más delicado mandar un mensaje de texto que llamar al móvil a la persona que ha perdido al ser querido, y me explico. Cuando telefoneas a alguien, no sabes en qué momento está, si es justo cuando se ha roto de dolor o si quiere estar solo. Un mensaje de texto puede ser más impersonal, pero se puede leer en el momento que la persona lo estime oportuno. Enviar un correo electrónico expresando nuestros pensamientos también puede ser apropiado.
Si no se puede ir al funeral, mandar una corona o ramo de flores es la mejor opción. El envío de una ofrenda floral es una manera muy apropiada de expresar condolencia, ya que las flores expresan belleza y sensación de vida. Lo más personal es acompañar las flores con una nota escrita a mano. Si el fallecido o su familia es judía ortodoxa, las flores noson nada oportunas.
Como dar el pésame
Particularmente, este puede ser uno de los momentos más difíciles a la hora de acudir a un velorio o entierro. En algunos momentos es complicado verbalizar ese sentimiento de tristeza, dolor, compasión, y apoyo al deudo.
El pésame se puede dar de manera física, por llamada o nota. Lo mejor es ser breve y sencillo. Si hay suficiente cercanía, no hay nada que transmita más que un abrazo sincero y sentido. Las frases pueden cambiar, pero siempre hay que mostrar nuestra cercanía a los allegados por el dolor que están sintiendo. Es más fácil de decir que de hacer, pero lo mejor es expresar lo que nos salga del corazón, sobre todo si la persona fallecida era allegada. Más que una manida frase tipo “Lo siento mucho”, da más consuelo que se recuerde algo de la persona que acaba de morir, como aspectos positivos de su carácter, algo que haya hecho por nosotros…. Seguramente sean esos detalles ínfimos los que consiguen reconfortar un poco a las personas que están pasando por ese difícil trance.
También hay veces que somos cercanos a la persona que ha perdido a un ser querido, no del fallecido en sí. En ese caso, hay que hacerle sentir nuestra empatía y ofrecernos a ayudarle en lo que pueda necesitar. Elogiar a quien no conocemos es falso e innecesario.
Comportamiento
Un funeral requiere de un absoluto respeto, pues nunca sabes cuándo te pueden estar mirando, o si puedes ofender a alguien con alguna actitud perdonable en cualquier otra ocasión.
En resumen, seamos cuidadosos, amables y respetuosos.